También a Trini, con mucho cariño y esperando que la provoque una sonrisa
No salen gatitos¡¡
Al día siguiente mientras me ocupaba de las tareas propias del hogar me extraño no oír al niño y al buscarle lo encontré en la cocina, subido en una silla junto al fregadero, tenia el grifo abierto y un cuchillo en la mano con el que golpeaba frenéticamente el chorro de agua; cuando le pregunté:
-Isaac ¿que haces?
Él totalmente disgustado me contestó
-¡Estoy rompiendo el agua... pero no salen gatitos¡¡
No tiene ninguna importancia lo que me costó convencerle de que los gatitos no nacían de esa manera, él nos había escuchado decir que la gata había roto aguas, no sabía como había que romper el agua y quería por todos los medios que yo se lo dijera, porque él también quería tener gatitos como su amiga Noe
Los niños nunca dejan de sorprendernos, parece que están a lo suyo y no se dan cuenta de las cosas, pero se enteran de todo, son verdaderas esponjas de la información
Creo que he comentado esta pequeña historieta de arriba un monton de veces, desde mi"celular" como dicen los hispanoamericanos, y aun no se ha grabado.
ResponderEliminarClaro que me gusta esta anécdota de tu hijo y es que los niños son mucho mas sabios de lo que nos parece. Yo aprendo continuamente de ellos, de la poca hipocresía que tienen, de la simpleza y sinceridad de sus actos, de la ausencia de diplomacia para todos los que les rodean y es por eso por lo que me encantan esos locos bajitos.
Cuando les pides algo te dicen un NO rotundo, y si fueramos nosotros buscariamos excusas a "tuti plen" para no darlo.En fin creo que el mundo sin niños sería un mundo monótono y aburrido, no tendría chispa, esa chispa que hace que todo sea mas dulce, tierno, simpático, y algo asi es como yo te considero a ti, mi querida Ana; dulce, tierna y con una chispa que no es fácil de igualar.
Un besito
Maria Jesus